16.6.05

Mi experiencia con inexpertos

Una de las preguntas recurrentes de los test de pureza es ¿con cuantas personas vírgenes has tenido sexo? Quizás para los hombres sea algo importante. Para mi han sido las relaciones más raras. A ningún hombre le gusta reconocerlo. Se comportan como les parece que tendrían que comportarse, como han visto en las películas, como se han imaginado que sería la primera vez. Tocan allá donde creen que tiene que tocar y con el ritmo que esperan que te guste, al fin y al cabo, no hay sino una primera vez, así que hay que currarselo para dejar un buen recuerdo. Quizás hasta esperan que haya la música perfecta, aunque a tí no te guste y no comprendas una palabra cuando te dicen los datos del grupo.
Mi primera vez fue horrible. Me sentí presionada para hacer algo que no me apetecía en realidad y aunque el tio estuvo buscandome durante meses, él no me atraía y tenía la ligera impresión que yo a él tampoco. Un día, unos cuantos nos reunimos a comer juntos. Entrábamos de nuevo a clase en un par de horas y no nos daba tiempo a ir a comer a casa. Una parejita, él y yo. La chica dijo "hace tres semanas que no lo hacemos. ¡Qué ganas!". Él utilizó la frase como reclamo, "ves, ellos ya lo hicieron". Lo hicimos en mi casa, mis padres trabajan y yo me quedaba horas sola en casa. Me dolió. Lo pasé muy mal. Supongo que aún no era el momento. Nunca me dijo "te quiero" ni yo a él, por supuesto. La última vez que nos vimos, noté que buscaba lo mismo que siempre, pero esta vez no le di la oportunidad. Supe que había crecido en el momento que fui yo quien decidió con quién y cuándo quería hacer el amor.
Ahora me esfuerzo en la empatía, comprender al otro y ayudarle a buscar lo que desea. Pero hay una cosa que no les puedo dar, la estabilidad.

10.6.05

Totoro

Hace años decidí dejarme de chorradas y no volverme a enamorar de mis polvos de una noche. Pero esta vez no funcionó, el encoñamiento no se me ha ido por la mañana, ni después de la ducha. Quizás porque ha sido uno de los polvos que más me he tenido que currar. Hasta el punto de la desesperación. Meses buscando esa noche, y la conseguí llorando, lo cual no me deja en muy buena posición. Había demasiada mierda en el ambiente, me frustré y me eché a llorar agarrada a su chaqueta, él me abrazó muy fuerte, apoyando su cabeza sobre mi hombro. No sé, creo que lo mal interpreté, malinterpreto sus gestos porque no puedo comprenderlo o quizás porque quiero algo más. Nos acostamos juntos, me esforcé en complacerlo, como siempre. Todo fue como debía ser, por la mañana me invitó a desayunar y me acompañó a la parada. Nos hemos vuelto a ver a menudo, pero quiero algo más que él.
Realmente, a veces es mejor no revolver aguas pasadas. Nos conocemos desde hace años. Me dijo "Intento comportarme contigo como soy ahora, pero me siento como cuando tenía 16 años"... Lo peor es que yo lo sigo viendo como el chico que quise con 16 años.